lunes, agosto 14, 2006

Esperanza o el Fracaso previo (Descripción Mal-Lograda III)

¿Y yo que hago aquí? Brasas en la piel humean el olor a fracaso. Sofocantes recuerdos corroen la vista hasta nublarla como nubla el despertar en una cama ajena a la ajena. Apesto a odio. Agonizo en el lugar donde nadie nunca logrará nada. ¡Mi cuerpo arde! ¡Mi cuerpo arde! Mi cuerpo es ese lugar.

Perdedor antes de la línea de partida, para ahorrarse el cansancio vano de una carrera perdida. ¡A la guerra contra la vida!

¡La soga no ayuda!

Arranco mi carne a pedazos marchitos, hediondos a expectativas que se evaporan en el piso. Se siente mejor pisotearlas que beberlas.

¡Ahórcate en tu paraíso, Adán! Jesús guillotinado por las hordas de innobles ávidos de respuestas sin preguntas. Revolución en el Edén, Apocalipsis en el Paraíso, Fuego en el Trono de Dios.

¡Mírenme!

Alzo mi copa en el bar donde la cerveza huele a orina y brindo por el fracaso de aquellos que no esperaban mas que perderlo todo. Bienaventurados los resignados por que a ellos de riquezas llenarán. ¡Bah!

Eva prostituyendose entre los muertos. Noé con una orgía zoofila en un barco a la deriva en el firmamento sangrante.

¡Mírenme!

Te saludo, Éxito, te estrecho la mano y te abrazo. No sin antes desnudarte hasta el pellejo y quitar tus vísceras con el odio que ante ti enciende mis ojos en llamas mas rojas y ardientes que las de Lucifer ebrio.

Soy capaz de la necrofilia contigo y hasta de entregar mi virginidad anal por hacer que tú pierdas la tuya, conmigo como amante activo.

Que más da.

Una vez que la esperanza está perdida, nada importa mas que embriagarse con mil botellas de venganza.